4 de febrero de 2018

La importancia de la Revolución de Octubre para la liberación de la mujer (Partido Comunista de los Trabajadores de Dinamarca)

Imagini pentru Partido Comunista de los Trabajadores de DinamarcaEn el último número de Unidad y Lucha, la revista de la CIPOLM (Conferencia Internacional de Partidos y Organizaciones Marxista-Leninistas), del pasado mes de octubre de 1917, se publica la conferencia de la presidente del Partido Comunista de los Trabajadores de Dinamarca (APK), Dorte Grenna, presentada en el Seminario sobre el significado de la Revolución de Octubre celebrado en Stuttgart en junio de 2017, en el que se analiza el enorme papel que tuvo el triunfo de la Revolución Soviética en la liberación de la mujer, tanto en la Unión Soviética como en el resto del mundo.

Partiendo de la afirmación de Federico Engels en su obra El origen de la familia, la propiedad privada y el estado, según la cual la introducción de la propiedad privada supuso una derrota histórica para la libertad de las mujeres, se demuestra que la abolición de aquella supone, como es lógico, el inicio del camino de su liberación y de su igualdad con el resto de los trabajadores. Todo ello asumiendo las tesis de la feminista comunita Clara Zetkin, según las cuales: 1)la lucha por la liberación de las mujeres trabajadores no puede separarse de la lucha general de la clase obrar y de la lucha revolucionaria por el socialismo; 2) la liberación final de las mujeres solo se puede alcanzar mediante la revolución y la construcción del socialismo; y 3) la participación de la mujer es esencial para el éxito en la revolución y en la construcción del socialismo.

En el artículo se recuerdan los cambios inmediatos que se hicieron en la legislación soviética para caminar hacia la igualdad entre todos los trabajadores independientemente de su sexo, tanto en la familia como en en el derecho al voto universal, que se aprobó por vez primera en la historia en la Constitución Soviética. También se destaca el cambio en la organización del trabajo, introduciéndose, también por vez primera en la historia, un salario igual para un trabajo igual, sin discriminación hacia la mujer como sucede, todavía hoy, 100 años después, en el mundo capitalista.

Cambios fundamentales como el acceso a la educación, la transformación del trabajo doméstico en un asunto colectivo, la reducción de la religión al ámbito privado, el acceso al aborto legal (también por primera vez en la historia), a la vez que la consideración de la protección del niño como un tema de importancia social (el deber social de construcción de guarderías, hospitales), además de la construcción de nuevas ciudades al servicio de los trabajadores, y no de los especuladores, cambió la vida de las mujeres y abrió el camino hacia la completa igualdad con el resto de trabajadores.

Imagini pentru la mujer en la revolucion sovieticaPor supuesto, no fue un camino fácil, y costó mucho por la oposición de los reaccionarios a los cambios revolucionarios que se produjeron en la sociedad soviética. En los lugares más recónditos y rurales se tuvo que hacer un esfuerzo mayor para implantar las transformaciones sociales, en el que tuvo un papel esencial la juventud, en especial las jóvenes comunistas que se encargaban de dar ejemplo y explicar el camino (a destacar las "tiendas rojas" entre los pueblos nómadas o las "cabañas de montaña").

El programa del Partido Bolchevique ya incluía la importancia de la igualdad entre todos los trabajadores y la liberación total de la mujer, por lo que en sus filas militaba un alto porcentaje. Así, en la Revolución el papel de la mujer fue tremendamente importante, en la lucha por alcanzar la igualdad y luchar contra la opresión, sabiendo que el requisito previo para ello era la Revolución (en este papel tuvo una importancia histórica el períodico Rabotnitsa, de Alexandra Kollontai o N.Krupskaya. De hecho, se crearon inmediatamente los "Soviets de trabajadoras y campesinas" en cada fábrica o cooperativa agricola, cuyo papel era, además de luchar por el éxito de la Revolución y el Socialismo, trabajar por la liberación e igualdad total de la mujer en los centros de trabajo y en la sociedad.

El cambio en el papel de la mujer y la liberación de esta fue la causa también de que en el momento de la invasión de las 14 potencias capitalistas en apoyo de los rusos blancos reaccionarios durante la Guerra Civil, o la nueva agresión, en este caso por los nazis, durante la Segunda Guerra Mundial, las mujeres participaran codo a codo, de igual a igual, en la defensa de su pueblo y del socialismo, no solo en la retaguardia, sino como pilotos de combate, francotiradoras, o en la linea del frente. La incorporación de la mujer en la defensa de la URSS hizo que sus recursos humanos fueran dobles a los de sus agresores.

Imagini pentru mujer del ejercito rojo
Dorte Grenna nos recuerda también que, lamentablemente, tras la muerte de Stalin y el triunfo de los revisionistas, que empezaron a desmontar gradualmente todos los logros conseguidos por la Revolución, los avances en el camino hacia la emancipación de las trabajadoras y campesinas soviéticas empezaron a ser recortados, y hoy en día las mujeres de las antiguas repúblicas y países socialistas tienen la misma situación de opresión y discriminación que el resto de países capitalistas, en los que la lucha feminista se reduce a exigencias burguesas ajenas a la lucha contra "el régimen de propiedad" que, como afirmaban Marx y Engels ya en El Manifiesto Comunista, es, precisamente, "la cuestión fundamental que se ventila" en toda lucha contra la opresión o por la emancipación, aunque en las dictaduras del capital se intente fragmentar los objetivos y atomizar los intereses de los trabajadores con el fin de desorganizarlos, desideologizarlos y desarmarlos para bien de la burguesía que vive a su costa.

Se trata de un artículo que debería leer la alienada juventud actual, en especial las mujeres, que les hará comprender que su lucha no va a ningún lugar si se hace aisladamente, si no es en el marco del motor de la historia, la lucha de clases, y con el objetivo de cambiar el régimen de propiedad, el sistema de explotación capitalista, que es, Marx y Engels dixit, "la expresión última y la más acabada de ese régimen de producción y apropiación de lo producido que reposa sobre el antagonismo de dos clases, sobre la explotación de unos seres humanos por otros".

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